¿Qué es calaveruela?
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es un cerro de la finca Monte Olivete
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y una quesería en la aldea de la Coronada, a 3 km de la finca
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y también es el queso que allí se elabora, de leche cruda de oveja y cortezas naturales,
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pero sobre todo es una bandera que representa un proyecto diferente.
Y todo ello es el Valle del Guadiato, tierra de Fuente Obejuna, al norte de la provincia de Córdoba, donde el paisaje se engulle a través de sus manjares.
Y calaveruela lo hacen (el queso) y de calaveruela proceden (del cerro) y calaveruela la llevan (la bandera), seis «calaveruelos», a saber: Juan Naranjo y Consuelo Migueles -ingenieros agrónomos- junto con Dani, el encargado de la quesería. Y Coto, que pastorea y ordeña a las ovejas. Pero es Chari quien los vende en el Mercado de Fuente Obejuna y Esther en el de Vallehermoso de Madrid. Y es que, son ellos de vender en Mercados y tiendas especializadas, porque «son sitios donde se puede hablar del queso, del productor y de todas las circunstancias que lo rodean».
Allá por 2014 Juan y Consuelo dejan acomodados trabajos de ingenieros agrónomos «por cuenta ajena» para volver «a la cuenta propia», comprometidos definitivamente, a las tierras de donde salieron y retomar el proyecto agroganadero iniciado por su familia hacía tres generaciones y quesero desde hacía dos, y que ellos ya venían compaginando con sus «empleos». Algún tiempo después de su retorno al campo, en 2015, los quesos Flor de Monte, desde 1980 de su familia, pasan a llamarse, por el destino, por el cerro, y por la bandera, inevitablemente, Calaveruela.
Con todo el empeño han recogido la herencia de sus antepasados y nos la han traído en forma de proyecto ecológico sostenible al siglo XXI. Como dice Jorge Guitián en Comida´s Magazine, «no es casual ni llega ahora fruto del azar, simboliza un cambio, una apuesta radical por lo artesanal y por lo personal. Bajo la marca aparece el subtítulo: queso de verdad. Nada más y nada menos». De ahí que para estos «calaveruelos» el proyecto sea en realidad su auténtica y nueva forma de vivir.
¿Pero qué proyecto?
Dice Juan Naranjo en All Those – en el artículo de Santi García- «En el campo no hacemos leche, hacemos queso. Es lo que da sentido y hace económicamente viable el tipo de explotación que tenemos…”. “Para nosotros es importante tratar de trasladar al queso el paisaje, la flora y los recursos naturales que tenemos. … Trabajar con leche cruda es respetar la materia prima al 100%.”. “ … respetar los tiempos, no acelerar… darle curso a la naturaleza, no tratar de hacer lo mismo en menos tiempo.”
Sigue diciendo Juan Naranjo, ahora en su recién estrenada web: «Respetamos el paisaje y el entorno natural en el que nos encontramos, atendemos a nuestro ganado, cultivamos cereales, forrajes y cuidamos de la dehesa y de los pastos que son la alimentación de las ovejas».
«Somos generosos en el trabajo, apegados a los valores de lo artesano y tradicional, pero sin dejar de experimentar, para darle más expresiones a los frutos de nuestra tierra, y donde el tiempo de la naturaleza nos marca su ritmo.
¿Esto es queso? o ¿Es otra cosa? Sin duda es su auténtica, sana, ecológica y sotenible nueva forma de vivir. Y un proyecto de éxito donde los números son una más de las variables a tener en cuenta.
Autor Joaquín Morales
Fotos realizadas por Justino Diez